
Esta feria se concibió para
homenajear a los hombres y mujeres del campo, y se ha convertido,
gracias a las actividades que incluye en su programación (exposición de utensilios
tradicionales de cultivos y labranza, catas de aceite, recuperación de
una matanza tradicional para la posterior transformación de alimentos,
almuerzo de un hoyo tradicional en compañía de los vecinos del
pueblo...) en una exaltación de nuestros valores y costumbres así como
de nuestra riqueza cultural y artística.